Su proceso de fabricación del fusing, aunque delicado es sencillo. Se trata de superponer a un vidrio base vidrios de color con el diseño deseado e introducirlo en el horno.
En este proceso no se deja lugar a la casualidad, sino que es el artista el que con su destreza consigue conectar técnica y creatividad. La mano del artesano y el fuego se combinan en armonía para crear unas piezas únicas e irrepetibles que confiere originalidad a la obra.